domingo, 20 de diciembre de 2015

sábado, 19 de diciembre de 2015

Me llaman feminazi




Como superviviente de incesto, me han violado más veces de las que puedo recordar. Pero cuando denuncio las violaciones me llaman feminazi.

Como hija de alcohólico he sufrido malos tratos durante décadas. Pero cuando denuncio los malos tratos me llaman feminazi.

Creo que tenia trece años la primera vez que fui a correr y un albañil me gritó que no corriera tanto, que a él le gustaba mi culo gordo. Desde entonces hasta ahora raramente pasa una semana sin que algún hombre me diga algo inapropiado por la calle. Pero cuando denuncio el acoso callejero me llaman feminazi.

Trabajando de auxiliar de clínica (con jornadas de doce horas y todos los domingos y festivos) cobro la mitad que todos los hombres que conozco que hacen ocho horas de lunes a viernes en una fábrica. Pero si denuncio la brecha salarial me llaman feminazi.

Me saqué el titulo de técnico sanitario con sobresaliente, la primera de mi clase. Cuando hice una entrevista en una empresa de ambulancias me dijeron que no contratan mujeres porque no tenemos fuerza para empujar una camilla. Pero si denuncio la discriminación laboral me llaman feminazi.

Hace poco estuve a punto de perder mi trabajo porque mi jefe estaba empeñado en besarme en la boca y yo no me dejaba. Pero si denuncio el acoso sexual en el trabajo me llaman feminazi.

POR CONTAR LA VERDAD SOBRE MI VIDA ME LLAMAN FEMINAZI.

viernes, 11 de diciembre de 2015

Till it happens to you




Me encanta este videoclip porque transmite tan bien lo que se siente cuando eres superviviente de violación... Todo el mundo diciendote lo que tienes que hacer, lo que tienes que sentir, "perdona y olvida", "no pienses más en ello", "cuantas más vueltas le des, peor", "si no estuvieses siempre pensando en eso no tendrías tantas pesadillas"...

Lo que necesita una superviviente es apoyo, respeto, que la escuchen, que la crean. Y si encuentra eso la recuperación es posible.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Sin Piel


Pues por ahí estaba yo. ¿Vergüenza? Lo que me da vergüenza es que cada año se despellejen vivos millones de animales y a nadie le importe un pimiento. Eso si que es una vergüenza y no que me vean el culo. Que no somos trogloditas, coño. No vivimos en cuevas, ni nos calentamos con una fogata, ni cagamos detrás de un pino, ni morimos de apendicitis. Estamos en el siglo 21, hay millones de telas sintéticas para abrigarse sin matar a nadie. Y mucho mejores. ¿O es que los alpinistas se ponen abrigos de piel para escalar el Everest? Pues eso.

Me dicen los de siempre que perdemos el tiempo. Que esto no sirve para nada. Lo mismo decían cuando recogía firmas contra la tauromafia. Por desgracia esto lleva mucho tiempo. Pero ganaremos. Porque tenemos razón.

"La única causa perdida es la que se abandona".
"Ninguna causa está perdida mientras quede un insensato dispuesto a luchar por ella".